hernia.
1. f. Med. Protrusión o salida de parte de un órgano, como el intestino, de la estructura anatómica que normalmente la fija.
Como en muchas otras
ocasiones, os diré que la osteopatía trata de buscar la causa o el
origen del proceso patológico por el que nos viene el paciente a la
consulta. Es una investigación única, que con cada paciente se
desarrolla de una manera particular. Tras la anámnesis (entrevista
que se hace al paciente) y la inspección optamos por un determinado
tratamiento, ya que habremos comprendido como funciona el paciente y
qué es lo que ha ocurrido para que llegara a esta situación de
desequilibrio por la que viene a vernos.
Una parte importantísima
de nuestro trabajo es hacer comprender a lxs pacientes qué es lo que
les sucede, es una parte más dentro del tratamiento. Personalmente
no creo que sea suficiente con decir que está todo interconectado.
El o la paciente es capaz de comprender si nosotros somos capaces de
explicar. Y esto les permite hacerse responsables y protagonistas en
la recuperación de su salud. Con este post intentaremos hacer ver la
relación que puede existir entre una hernia discal y un mal
funcionamiento del sistema digestivo.
En medicina, al igual que
otras materias, quizá con un fin educativo, quizá porque la
especialización nos dificulta una visión general del individuo se
habla de distintos sistemas que parecen yuxtapuestos (articular,
digestivo, circulatorio...). Uno al lado del otro. Se tocan pero no
se interfieren. Para cada tipo de enfermedad, un especialista. Y esta
visión se extrapola a la calle. Y una vez que el puzzle está
desarmado es arduo irlo recomponiendo.
En el caso de hoy hay lazos importantes que nos hacen comprender la posible relación
entre hernias discales y sistema digestivo.
UN POCO DE ANATOMÍA
El disco vertebral, que
se halla entre el cuerpo de dos vértebras, tiene un núcleo y una
serie de capas concéntricas que lo rodean. El núcleo es una
sustancia acuosa, tipo gel, que se adapta y reacciona a los
movimientos de las vértebras que articula.
Los anillos o capas
concéntricas tienen la función de hacer que el núcleo permanezca
en su lugar y de dispersar las presiones que recibe el núcleo por
parte de las vértebras.
Cuando los anillos
fracasan en su cometido, cuando hay una grieta por donde puede
emigrar el núcleo, se produce la hernia (o protusión).
Es importante señalar
que en muchas ocasiones el dolor lumbar, que típicamente acompaña a
una hernia, puede no venir de la hernia en sí misma sino de otros
tejidos adyacentes (ligamentos, músculos, meniscos)
BIOMECÁNICA LESIONAL
Pero ¿por qué los anillos fracasan? ¿por qué se dañan y aparecen grietas? El disco,
en conjunto, es un tejido muy resistente, pero muy poco vascularizado
y no inervado. Es capaz de soportar un gran trabajo pero es muy
difícil y lento de reparar. Si superamos su límite, el daño
producido permanece mucho tiempo. El límite lo podemos superar en:
- un movimiento brusco (cargar algún objeto pesado, un accidente...),
- movimientos leves pero repetitivos (estrés continuo)
- o por ambas cosas a la vez. Es decir, una situación de estrés continuo junto a un esfuerzo no muy intenso.
Esta última es la
situación más común. Es muy importante, comprender bien ese estrés
previo al que está sometido el disco. Este estrés previo viene
cuando ese nivel vertebral está soportando más trabajo (es más
móvil) porque algún otro segmento tiene una restricción (es menos
móvil). Por lo tanto al hacer gestos cotidianos leves, el nivel
móvil está realizando su trabajo más el trabajo del segmento que
está en restricción. Esta carga continua junto con la lentitud con
la que el disco se repara es la responsable de la hernia o la
protusión.
Generalmente (y digo
generalmente, pues el cuerpo humano muchas veces compensa de una
manera que no podemos comprender), si el sacro no tiene buena
movilidad es el nivel L5-S1 (disco entre la lumbar quinta y el sacro)
el que sufre; si la restricción es de sacro y L5 es el disco L4-L5
el más dañado.
¿Qué puede hacer que un
nivel o vario de estos niveles estén restringidos?
Un accidente, una caída
hace años, nuestra actividad laboral frecuentemente nos restringe la
movilidad en una de las articulaciones entre el sacro y la pelvis.
Una articulación con una movilidad mínima pero de gran importancia.
Esta falta de movilidad del sacro exige a la vértebra inmediatamente
superior, L5, más trabajo que aquél para la que está diseñada. Y
es éste el origen del problema.
UN POCO MÁS DE ANATOMÍA
En el caso que nos ocupa;
la relación de ciertas hernias con un sistema digestivo que no
funciona correctamente, tenemos que destacar ciertos detalles
anatómicos:
- El recto, la última parte del intestino, reposa en la cara anterior del sacro, en íntimo contacto con él.
- El colon descendente se apoya en la fosa ilíaca izquierda.
- El colon sigmoideo se halla colgado de un tejido que se ancla en una zona entre la cuarta lumbar (L4) y la quinta (L5).
¿Qué sucede ante
problemas de tránsito intestinal? ¿Digestiones pesadas o sensación
de hinchazón después de comer? ¿Gases o flatulencias excesivas?
¿Episodios alternantes de diarreas y estreñimiento? ¿Dolor
abdominal o sensibilidad a algún alimento o sustancia?
Lo que sucede es que el
mal funcionamiento del intestino, la percepción visceral que el
sistema nervioso tiene y la plenitud de la última parte de tubo
digestivo (en casos de estreñimiento) hacen que el cuerpo haga lo
posible por no mover la última parte de la columna (sacro y quinta
lumbar), produciendo en este caso una falta de movilidad o
restricción que estresan y cargan de trabajo a los segmento
superiores. Y como dijimos más arriba, esta carga de trabajo es la
responsable del deterioro del disco.
¿Puede solucionarse un
caso así?
Cada caso es un mundo,
depende de la etiología concreta y del estado en que se encuentre.
Pero, o bien puede solucionarse y que el dolor desaparezca
totalmente, o bien puede mejorar sustancialmente. Si el paciente
comprende la evolución de su caso es más fácil que siga los
consejos dietéticos oportunos y la higiene postural que le
recomendemos.
¡En la comprensión y la
responsabilidad está el éxito!
Por Jairoslow
Por Jairoslow
Muy interesante...
ResponderEliminarUna explicación muy completa...Ya tengo ganas de más, jejejeje...
ResponderEliminarBesos!
Curiosa la relación que el sistema digestivo puede tener con la columna... Muy interesante.
ResponderEliminarUn abrazo.
Fantástico. Es una pena que por lo general en la medicina occidental tiendan a separar cuando en realidad todo está interconectado. Genial el artículo!!! (del proyecto ya comenté ;^D). Comparto el mismo en FB.
ResponderEliminarBesotes!!!.
Madre mia todo lo que vamoa a aprender por aquí. Interesantísimo. Gracias!
ResponderEliminarMuy interesante todo los que nos comentas aquí. Muchas gracias por esta explicación tan amena y minuciosa al mismo tiempo.
ResponderEliminarBesos